Según Iguazú Argentina

La Garganta del Diablo estará habilitada en 30 días

Publicada 01/07/13
La Garganta del Diablo estará habilitada en 30 días

Ninguno de los pilares de hormigón se ve comprometido, según se visualiza desde el aire, permaneciendo intactos ante el caudal incrementado del río”, destacaron desde Iguazú Argentina (IA), empresa consecionaria del Parque Nacional misionero, ante lo cual adelantaron que en “en unos 30 días” podría ser rehabilitada la Garganta del Diablo.

El informe de IA, hecho tras el relavamiento aéreo del ingeniero y gerente de operaciones de la empresa, Marcelo Zuliani, se determinó que “todo indica que el sistema diseñado y construido por Iguazú Argentina ha vuelto a dar muestras de su solidez, ya que ninguno de los pilares de hormigón se ve comprometido”.

La Garganta del Diablo estará habilitada en 30 días.
La Garganta del Diablo estará habilitada en 30 días.

En ese sentido, agregan que dichas estructuras permanecen “intactas” pese al caudal incrementado del río, por lo cual “sólo será necesario reemplazar los tramos metálicos desprendidos, agilizando así el proceso de rehabilitación”.

Aclaran que una vez que baje el río Iguazú, “se procedería al rearmado de las pasarelas, siguiendo los mismos procedimientos llevados a cabo en las anteriores situaciones que originaron que se rebatieran las pasarelas, de acuerdo a los protocolos de emergencia vigentes en el área Cataratas del Parque Nacional Iguazú”.

El fin de semana, y previo a este informe, Zuliani había explicado que las pasarelas del Parque Nacional Iguazú no sufrieron roturas por la crecida, sino que se trata de un mecanismo “que se activa para que no se dañe la estructura”.

Funcionamiento de las barandas cuando aumenta el caudal del río.
Funcionamiento de las barandas cuando aumenta el caudal del río.

Detalló que cuando el río está bajo, las barandas de las pasarelas están levantadas y permiten la circulación de la gente hasta la Garganta del Diablo y cuando sube se rebaten “para permitir que el flujo de agua pase libremente, reduciendo la resistencia”. Agregan que cuando el nivel aumenta –como ocurrió en los últimos días- se procede a desprender las pasarelas “para no comprometer la estructura de hormigón”.

Vale recordar que si bien el acceso a la Garganta del Diablo permanece cerrado, el circuito inferior, el Superior y todo el Parque Nacional permanecen abiertos.

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